¿Por qué será que muchos aficionados al vino creen que tienen que dar su opinión sobre un vino, una zona vitivinícola, o un país, cuando la mayor parte de las veces ésta se basa en ideas preconcebidas, que no son exactas o que, directamente, son erróneas?
Si me dieran un euro por cada vez que alguien me ha hecho un comentario taxativo y radical en relación al vino y sobre un país, uva o región, ¡tendría muuuucho dinero para comprar algunos vinos verdaderamente buenos!
Con frecuencia, cuando alguien viene a comprar vino a The Wine Place, o cuando tenemos una cata, escucho comentarios como “todos los vinos franceses son…”, o “todos los Rieslings son…”, o “todos los vinos blancos españoles tienen…”, “el champagne español…”, “los vinos alemanes siempre son dulces”, o “Rioja es mejor que Ribera del Duero”.
Cuando tenemos un curso o una cata, a menudo catamos a ciegas, para comparar y contrastar sin ideas preconcebidas sobre cómo debería saber el vino. De esta forma aprendemos a apreciar las similitudes y diferencias.
Pongamos el comentario “todos los vinos franceses son muy potentes y caros”. Hay algunos vinos francés que tienen mucho cuerpo y ciertamente son caros, pero es absurdo colegir de ello que todos lo son. Descubrir la vasta variedad de vinos franceses lleva su tiempo, y en el camino puede que cates algunos francamente malos. Sin embargo, no puedes formarte una impresión sobre una zona o país basándote en una única mala experiencia. Es fascinante cómo varían dependiendo de la zona, desde los más exquisitos y elegantes (y caros) del mundo hasta aquellos vinos que son poco más que un zumo de uva hecho vino. Y entre medio de estos extremos puedes encontrar todos los demás. Si en alguna ocasión has tomado un Pouilly Fumé bien fresco con pescado, la reacción con toda probabilidad sea de enorme agrado.
Otro de los comentarios que escucho con frecuencia es “los Rieslings son dulces y a mí no me gustan los vinos dulces”. Es cierto que catar un Riesling barato y comercial, con frecuencia con un nivel alto de azúcar residual, no es una experiencia agradable. Así que evita tomar vinos baratos, así de sencillo. Riesling es una uva que se desarrolla en climas fríos, especialmente en su lugar de origen, en Alemania, y también en Alsacia, Australia y Nueva Zelanda. Si buscas un poco, encontrarás Rieslings que te sorprenderán de verdad. La mayoría de ellos son secos, con una variedad de aromas y sabores muy agradables: florales, cítricos, miel, incluso petróleo… Los vinos que son dulces de forma natural pueden ser increíbles. Echa un vistazo al término “auslese” en las etiquetas de los vinos alemanes.
Recientemente le recomendé un Godello de Ribeiro a un cliente francés que me dijo que “en España no hay blancos buenos”. ¿En serio? ¡Hay algunos vinos blancos españoles increíblemente buenos! ¿Ha probado un buen Albariño, Godello o un Moscatel seco? Probablemente no, pero le hice algunas sugerencias de vinos que puede probar para que en adelante no haga esos comentarios sin sentido.
Aquí en España, cuando pides una copa de vino en un bar o cuando vas a un restaurante con amigos, la mayoría de las veces te dan dos opciones para elegir: Rioja o Ribera. Para muchas personas otra de las ideas preconcebidas es que “es mejor ir sobre seguro”. Dependiendo del establecimiento, hay muchos sommeliers bien formados y con capacidad de hacerte sugerencias sobre diferentes vinos. Así que comienza por dejarte aconsejar antes que ir siempre a lo seguro.
Si tienes ideas preconcebidas que influyen a la hora de escoger un vino, ten en cuenta que es probable que sean erróneas. Cada vez que catas un vino nuevo, deja que el vino te diga cosas. Lo importante es encontrar el estilo de vinos que más disfrutas, ¡y ello implica olvidar los prejuicios!
Mark O’Neill DipWSET es el propietario de The Wine Place, Valencia.